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lunes, 24 de julio de 2017



COMPARTIR O COMPETIR-EMPRENDIMIENTO.
María Alejandra Marín Londoño.
11°6


Podría parecer que los términos compartir y competir fueran excluyentes el uno del otro, pero la realidad nos demuestra que esto no es así.

Desde pequeño se comienza todo a “compartir y competir”, esto se comienza en
cosas simples como competir con el compañero a hacer la tarea o a quien come mas rápido y es por que desde pequeños tenemos un nivel de competitividad así sea bajo, y compartiendo porque nuestros padres no lo inculcan.


Compartir, en cambio, también puede tener una vertiente negativa.

En definitiva, una actitud obsesiva o enfermiza respecto a la competitividad, generará consecuencias negativas en el otros y, por otra parte una actitud mal entendida y grosera por causa de la competitividad es muy malo porque uno debe de aprender a competir y a compartir son diferentes pero hay que saberlas usar.



Compartir supone partir de un grado de autonomía previamente saber detectar necesidades y qué hacer para solucionarlas.

En este caso compartir significa trabajar en equipo, porque es muy importante. En muchos casos de la vida tienes que saber trabajar en equipo y sobre todo saber compartir.


En el ámbito de las organizaciones, son frecuentes las negociaciones.

En este caso se hablan sobre las negociaciones pero algo primordial para ello es solo se piensa en sí mismo, primero yo, segundo yo, etc.



Las dos características que definen nuestro entorno económico actual son la incertidumbre y la complejidad.

El éxito está en generar entornos de conocimiento compartidos, basados en la gestión de la interdisciplinariedad-capacidad para trabajar de forma conjunta varias disciplinas para resolver un mismo problema. El talento individual se multiplica cuando somos capaces de ponerlo en contacto y hacerlo trabajar con los demás.



Muchas veces, el liderazgo
marca de forma importante el modelo de comportamiento de una organización.

En este caso hablamos del liderazgo compartido, que esto conlleva a saber compartir y saber tener el liderazgo entre dos personas sin tener discusiones y problemas.



¿Por qué el liderazgo compartido?

Para saber compartir en todo momento, porque debemos de saber que en casi todas las ocasiones sabemos que se va a presentar esto.



Según mi experiencia, para lograr esta armonía en una organización, hay seis aspectos que hay que potenciar:

En este caso se habla que hay tiempo para todo por ejemplo para la familia, para el estudio, para bromear, para los amigos, etc. O sea que no siempre nos vamos a quedan atrancados haciendo una cosa y diciendo que no queda tiempo para nada.


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